La reforma normativa que se implementó, inicialmente vista con escepticismo, ha demostrado tener un impacto positivo en los procesos de reestructuración y la preservación del valor de las empresas en España. El objetivo de establecer un proceso eficaz de reestructuración preventiva ha llevado a que las empresas puedan abordar problemas financieros, obtener viabilidad y continuar sus operaciones.
A pesar de que los procesos de reestructuración no son numerosos, profesionales del sector notan diferencias significativas en la forma en que se abordan estos problemas en comparación con la situación anterior a la reforma. Se están viendo soluciones novedosas, procesos ágiles y resultados distintos a los del pasado.
La nueva norma ha introducido cambios notables en los planes de reestructuración, marcando diferencias con los acuerdos de refinanciación y acuerdos extrajudiciales de pagos. Esto incluye definiciones más claras de los créditos afectados y la posibilidad de modificar la estructura de capital de la empresa.
Uno de los aspectos más positivos de la nueva norma es la armonización con las regulaciones de otros países europeos, lo que refleja la realidad económica de estas situaciones y operaciones. También proporciona un mayor nivel de seguridad jurídica, lo que atrae a inversores y mejora la competitividad económica.
Sin embargo, algunos expertos destacan que aún no se ha presentado suficiente cantidad de planes de reestructuración para una evaluación adecuada, y será necesario esperar para ver si los mecanismos legales se ajustan a la práctica. Se plantea la necesidad de ajustar el régimen jurídico, especialmente en relación con las pequeñas y medianas empresas.
En última instancia, se destaca la importancia de cambiar la mentalidad empresarial y considerar la reestructuración como una herramienta normalizada y no solo como una última opción cuando ya es demasiado tarde. La clave es utilizar los planes de reestructuración cuando el deudor está en una situación de probabilidad de insolvencia, en lugar de verlos como una herramienta de último recurso en situaciones beligerantes.
(Expansión, 26-09-2023)