A unas horas de que el gobierno federal de Estados Unidos se quedara sin fondos y se produjera un cierre parcial, el Capitolio ha anunciado una prórroga presupuestaria hasta el 17 de noviembre. Esta sorpresiva prórroga permitirá al gobierno de Estados Unidos continuar su funcionamiento normal el domingo y abrir el lunes sin interrupciones, al menos hasta el 17 de noviembre, fecha acordada por los congresistas el sábado por la noche, apenas tres horas antes de la fecha límite.
Después de una sesión sin acuerdo el viernes, las perspectivas de que el sábado fuera productivo eran escasas, ya que todas las vías de negociación parecían agotadas. La facción más conservadora del Partido Republicano había bloqueado todas las posibilidades, incluso a costa de dejar en evidencia a Kevin McCarthy, líder de la mayoría republicana y portavoz de la Cámara de Representantes.
Ante esta situación, la única alternativa era que McCarthy buscara votos de los demócratas para evitar el cierre, aunque fuera temporalmente. Hubo pocas esperanzas de que esto sucediera, ya que su propio partido le había advertido que pedirían su destitución si aceptaba la ayuda de los demócratas.
"Si quieren presentar una moción en mi contra, que lo hagan; alguien tenía que ser el adulto", señaló McCarthy después de tomar la decisión de negociar con la bancada contraria para evitar la situación de cierre. De lo contrario, cerca de dos millones de funcionarios públicos habrían quedado suspendidos de empleo y sueldo el domingo o, en el peor de los casos, con empleo pero sin sueldo (en el caso de los servicios esenciales, se les habría exigido trabajar sin cobrar).
Para llegar a un acuerdo, fue necesario dejar fuera la ayuda prevista para Ucrania, que ascendía a 6.000 millones de dólares, así como las demandas de la facción más dura del Partido Republicano relacionadas con el control fronterizo. En gran medida, el gasto aprobado previamente permanece sin cambios, excepto por una partida adicional de 16.000 millones de dólares destinada a ayuda en casos de desastres naturales (huracanes, inundaciones, etc.).
La acción de McCarthy obtuvo la aprobación después de las cinco de la tarde, lo que dejó poco margen al Senado para una votación de emergencia que se logró a las 21:00 horas, manteniendo al país en vilo casi hasta el último minuto.
A partir de este punto, McCarthy tiene un plazo de 45 días para avanzar en las propuestas presupuestarias que acordó con el presidente Joe Biden en mayo de este año, cuando se negoció el aumento del límite de deuda para evitar un impago de la principal economía del mundo. También deberá lidiar con los intentos de varios miembros de su partido que buscan destituirlo de la presidencia de la Cámara. Las críticas en su contra no se han hecho esperar, con congresistas republicanos como Bob Good, que calificó el acuerdo como una "rendición total" y prometió apoyar cualquier intento de destitución.
(El País, 02-10-2023)